León, Gto.- Con el propósito primordial de contagiar el gusto, el compromiso por ayudar a los demás, la Universidad Iberoamericana León fue sede de la Conferencia: ¿Tenemos que cambiar la cultura de dar en México? La cultura de la filantropía, una visión comparada
Robert Murray Hopkins, catedrático de vocación, filántropo por convicción y pasión, impartió esta conferencia que buscó ser una invitación a sumarse a las filas de la cultura de dar, de aportar a los demás.
En su exposición, consideró que el problema al que se enfrenta la filantropía radica en que las personas no tienen fe en las organizaciones. Explicó que las personas dan a las personas y se les dificulta dar a entes, a organismos, porque no lo ven palpable, no lo humanizan. “ Sólo damos a quienes o con quienes tenemos relación”.
Con una fe que contagia, Bob, como se le conoce mejor, afirmó que “dar te hace feliz”. Puntualizó que el gobierno aporta pero el resto nos corresponde a nosotros.
Con una charla interactiva, explicó a los asistentes a la conferencia lo fácil que es formar una organización filantrópica, desde determinar su finalidad, identificar liderazgos y perfiles para conformar el consejo hasta alcanzar el propósito y responder al compromiso como ciudadano de ayudar, de aportar para el desarrollo y el crecimiento social.
Apenas hace unos días, Jorge Villalobos presidente del Centro Mexicano para la Filantropia A.C explicó que hoy en el país con 115 millones de habitantes hay cerca de 7 mil organizaciones donatarias, es decir que pueden expedir recibos deducibles de impuestos, en Guanajuato se ubican 240 organizaciones, y 119 de ellas operan en León.
Destacó que si bien ha crecido el asociacionismo, no ha sido lo suficiente y como parámetro refirió que en Estados Unidos con 300 millones de habitantes hay 2 millones de asociaciones civiles.
Coincidió con lo expuesto por Hopkins en cuanto que “tenemos el reto de promover la participación ciudadana, la filantropía, y la responsabilidad social de las empresas, para responder a las necesidades de la población marginada del desarrollo económico y social. Todo buen ciudadano tiene la responsabilidad de aportar su talento y parte de su trabajo por el bienestar público.
En su conferencia Bob Hopkins, explicó que antes de su llegada a México, le dijeron que en nuestro país no hay cultura de dar, situación que afirmó se puede cambiar y el secreto es comenzar persona por persona. Se refirió a su libro “dar para vivir”, en el que asegura que cuando das, tu vida es mejor, la familia, tus actitudes son mejores, son positivos, la autoestima es mejor cuando ayudas a otra persona.
