Fotografía: Ibero Torreón
Con el tema central de la Calidad Académica en las obras educativas de la Compañía de Jesús, este miércoles dio inicio en la Ibero Torreón la Reunión anual del Sistema Universitario Jesuita (SUJ), encabezada por los rectores de Ibero CDMX, León, Torreón, Tijuana, Puebla, ITESO Universidad jesuita de Guadalajara, Instituto Superior Intercultural Ayuuk ISIA y el Tecnológico Universitario del Valle de Chalco TUVCH.
En la inauguración, la Mtra. Lorena Giacomán, Asistente de Educación de la Compañía de Jesús, planteó que el encuentro se lleva con el entusiasmo y la esperanza de proyectar escenarios posibles para la educación universitaria y el anhelo de iluminar el dilema de la Calidad Académica en la educación superior.
Aseguró: “Hablar de Calidad Académica en las universidades confiadas a la Compañía de Jesús implica no sólo formar personas competentes, sino críticas, compasivas y solidarias. Por lo tanto, para hablar de excelencia académica es indispensable considerar la competencia profesional junto con la formación integral y el compromiso social de nuestros estudiantes, docentes y personal directivo”.
“Sólo la proximidad puede generar la compasión”.
La primera conferencia de la Reunión fue impartida por el P. Francisco José de Roux Rengifo S.J., quien un día antes recibió del SUJ en la Ibero Ciudad de México el Doctorado Honoris Causa por su compromiso en la promoción de la paz en Colombia y su contribución a la dignificación de las víctimas del conflicto armado.
El sacerdote jesuita compartió un mensaje en relación a cómo los mexicanos y las mexicanas podríamos tejer procesos de paz para sembrar la esperanza en medio la desesperanza.
Aseguró que en México se ha querido afrontar los temas económicos, las desigualdades y la injusticia, pero el problema más grande radica en las personas, “la forma en que los seres humanos nos estamos destruyendo”.
Tanto en México como en Colombia, expuso el doctor De Roux Rengifo, nos hemos centrado en el desarrollo de infraestructura, economía y cultura, pero esto se ha construido desde la base del dolor humano. Por eso, dijo, una primera estrategia para tejer la paz es estar próximo y próxima a las víctimas de la violencia.
“Nadie tiene más autoridad que las víctimas, ni las universidades ni la iglesia ni los partidos políticos (…) Su palabra vale más que cualquiera. Las víctimas hablan del esposo que le mataron, del hijo que le secuestraron, del cuerpo sin piernas, de la confusión emocional que hay en su familia después de un secuestro de 14 años. Cuando pasan de ser la víctima al estatus público de decir ‘¡No! ¡Este país lo vamos a cambiar!’ las cosas toman un tinte distinto”.
Manifestó que debemos estar al lado de las víctimas, sentir a las víctimas, verles como las personas que son y no como cifras o documentos escritos; si bien, analizar datos y hacer investigación académica es “riquísimo”, las personas y sus historias deben “pegarnos al alma. La primera verdad es sentir el dolor de las víctimas, sólo la proximidad puede generar la compasión”.
Liderazgo, esencial en la Calidad Académica.
La jornada inaugural de la Reunión anual del SUJ contó con la conferencia magistral del Dr. Marcos Sarasola, vicerrector de programas académicos de la Universidad Católica de Uruguay y coordinador para América Latina de la Fundación Horreum de Bilbao.
El especialista expuso que la Calidad Académica debe consolidarse desde tres dimensiones: técnica, sistemática, pero sobre desde lo humano.
Consideró que los puestos de liderazgo en la academia deben preponderar la innovación sobre las creencias. En ese sentido, es importante apostar por el trabajo colaborativo, el desarrollo profesional docente, la visión compartida, la efectividad docente, el apoyo mutuo, el estímulo y el reconocimiento profesional, el liderazgo y la planificación compartida.
Agregó: “Está en nosotros –desde nuestros puestos de liderazgo– hacer y construir esta cultura (…) Cambiar la cultura lleva años porque la cultura se nutre de experiencias exitosas; en la cultura de la innovación la gente trabaja colaborando”.
Para llevar a bien el liderazgo, mencionó que se puede echar mano de recursos cognitivos como la resolución de problemas, el conocimiento específico y el pensamiento sistémico; recursos sociales como la percepción y administración de emociones, y actuar emocionalmente bien; y recursos psicológicos como el optimismo, la autoeficacia, la resiliencia y la proactividad.
Concluyó que la coherencia hace al liderazgo y el liderazgo determina un estilo de hacer las cosas: “Mi misión como vicerrector es hacer el bien, tener en cuenta a la otra persona, apoyar, ayudar intelectual y emocionalmente. Esta dimensión de la persona es la dimensión clave del liderazgo, que desde el puesto en el que estén tienen que llevar adelante porque eso hace un diferencial en la Calidad Académica”.
En el encuentro anual del SUJ participa el rector de nuestra Ibero León, Mtro. Luis Alfonso González Valencia SJ, quien formó parte del panel de la conferencia magistral del doctor Marcos Sarasola.
