"De la espiritualidad ignaciana aprendimos cómo no permitir que nuestro corazón se endureciera ante los tiempos difíciles, cómo educar para la esperanza, entendimos que podíamos elegir cómo gastarnos la vida”. Dra. Martha Mora Cantoral
Nuestras autoridades entregaron a nombre de la comunidad universitaria el Reconocimiento al Mérito Universitario 2021 a académicos y académicas, cuya adhesión al proyecto universitario lleva más de 15 y 20 años y cuya contribución al desarrollo de la vida universitaria se ha destacado.
"La Ibero los distingue como personas cualificadas por su adhesión al Ideario de la universidad, por su destacada labor docente e investigadora, por sus habilidades directivas, por su espíritu de servicio, por su acusada entrega a la formación integral, etc.”
La ceremonia, estuvo presidida por el Dr. Alexander Paul Zatyrka Pacheco, de la Compañía de Jesús, Rector de esta institución; por el Dr. Javier Prado Galán, de la Compañía de Jesús, Director General Académico y la Mtra. María de los Ángeles Nieto Estrada, Directora General de Integración Comunitaria.
La Mtra. Ángeles Nieto destacó en su mensaje que para responder a la demanda formativa de nuestras y nuestros estudiantes, es indispensable que la tarea educativa esté acompañada por personas que, de acuerdo con la Filosofía Educativa de la Universidad, tengan "la capacidad para desarrollar el humanismo integral, que sean docentes creativos, libres, solidarios, afectivamente integrados y conscientes de la naturaleza de su actuar, es decir, con correspondencia real entre los valores que profesan y el modo práctico como actúan y llevan a cabo los procedimientos institucionales”.
Hoy nos congregamos, dijo, para encomiar la docencia, la investigación, la gestión y los servicios educativos en la labor universitaria que los caracteriza a ustedes, quienes reciben este reconocimiento, y a quienes agradecemos su trayectoria y su compromiso, lo que hace evidente la relación de congruencia entre la identidad (ser) y el quehacer (hacer) que les distingue, en el marco de un sistema de valores universitarios para actuar en consecuencia y que responde a la tradición espiritual y educativa de la Compañía de Jesús.
El doctor Javier Prado Galán de la Compañía de Jesús expresó: Los laureados son personas que, objetivamente, han demostrado su valía académica y universitaria a lo largo de 15 ó 20 años de presencia constante y fecunda en nuestra casa de estudios.
El palindrómico verbo "reconocer” les pertenece con toda su elemental riqueza. La Ibero las y los reconoce. La Ibero les agradece todos estos años de productiva entrega, todos estos años de honrar la vida académica y universitaria. Va para ustedes con dedicatoria el final del poema "Los justos” de Borges: "esas personas, que se ignoran, están salvando el mundo”.
Los distinguidos
Dos son las medallas que se designaron para este reconocimiento, en honor a dos figuras ilustres ejemplo de entrega y liderazgo.
La Medalla JORGE VÉRTIZ CAMPERO S.J., con la que se rememora una vida de entrega y amor personificada, un modelo de liderazgo compartido. Testimonio del compromiso de un hombre que se convirtió en animador del compromiso de otros y catalizador de sinergia de múltiples intenciones para lograr grandes obras, entre éstas la Iberoamericana León.
"Debemos al Padre Jorge Vértiz la expansión, junto con otras personas entrañables, de la Ibero León. Su visión hizo posible que el Bajío contara con una universidad de inspiración cristiana y de excelencia con la impronta jesuita tatuada hasta el tuétano. Los galardonados con la Vértiz puede presumirse herederos de este empeño” señaló en sus palabras el Padre Prado.
Reciben la Medalla Jorge Vértiz Campero por 15 años de colaboración: la Mtra. Ma. Teresa Caballero Liceaga; Dra. María Susana Cuevas de la Garza; Mtra. Ma. Guadalupe Fernández Aguilera; Mtro. Daniel Huerga García; Mtra. Mireya Lourdes del Pilar Lozano Saldaña; Mtra. Mónica Minutti Sánchez Alcocer; Dr. Mauricio Fernando Miranda Salazar; Mtra. Diana Fabiola Pantoja Mercado; Mtra. Rosa Ma. Rodríguez González; Mtra. Lidia Araceli Rodríguez Pérez; y la Mtra. Martha Eugenia Sánchez Cabañas.
La segunda medalla se instituye en memoria del Jesuita español, PEDRO ARRUPE S.J. quien fuera el 28º. Prepósito General de la Compañía de Jesús desde 1965 hasta 1983. "Debemos al Padre Pedro Arrupe la refundación de la Compañía de Jesús en el siglo XX. Su visión oxigenó, con la divisa "fe y justicia”, el carisma de los jesuitas en las fronteras de la Iglesia y del mundo. Los galardonados con la Arrupe muestran con orgullo la huella del infatigable vasco”.
Recibieron la medalla Pedro Arrupe, por 20 años de colaboración: la Mtra. Diana Cárdenas Garza; Mtra. Martha Mora Cantoral; Mtro. Jaime René Santos Rendón; Dr. Luis Adolfo Torres González.
A nombre de los distinguidos, la Dra. Martha Mora Cantoral expresó su agradecimiento "No quiero referirme a una gratitud condicional, aquella que se experimenta cuando las cosas resultaron como se deseaba, prefiero una gratitud realista que reconoce en el balance más frutos que pesares, frutos de ésos que forman parte de cada quien, que nadie puede sustraer. Una gratitud consciente de que en este caminar hay periodos cíclicos de desconcierto, seguido de oportunidades y tiempo de consolación”.
Rememoró enseñanzas de jesuitas entrañables, de proyectos, ideas propias, de otros, para otros (as), la lucha por las causas: la zapatista, feminista, la defensa de los derechos humanos... 30 años de trabajo y dedicación a nuestra universidad.
"La Universidad nos ha regalado bienes concretos más allá de la relación laboral, hemos compartido experiencias vitales con personas que a la postre se convirtieron en amigos y amigas entrañables, hemos participado del proceso de formación de jóvenes, una de las tareas de mayor responsabilidad social y que hoy, con la irrupción de la pandemia nos convoca a reinventarnos como docentes”, expresó.
Sin su entrega, la Ibero León no sería lo que hoy somos
En su mensaje el doctor Alexander Paul Zatyrka Pacheco SJ rector de nuestra Ibero León les compartió: Mi definición favorita de santa y santo, según la tradición cristiana, resalta que quien recibe esa distinción no lo hace tanto por ser alguien "admirable”, sino porque cultivó el arte de descubrir lo "admirable” en cada persona y esforzarse por acompañar a cada una a manifestar lo mejor de sí mismo, de sí misma. El campo semántico sacro – santo tiene una misma raíz indoeuropea, "sak- ", que significa "1”, "real”, "que confiere existencia”. Por eso la santa o el santo, más allá del estereotipo devocional, son seres humanos reales, 1s, que ayudan a las y los demás a descubrir su propia "verdad”. Un buen académico universitario, una buena académica universitaria necesita cultivar este mismo arte.
El Padre Zatyrka les reconoció su erudición, sabiduría, su sensibilidad humanista, todas virtudes de un buen profesor (a) pero, además, destacó: "les reconocemos hoy por su contribución a la formación de toda la comunidad universitaria. Hago referencia a la calidad humana de sus interacciones con compañeras y compañeros de trabajo, a su integridad ética, a su dedicación y transparencia en las obligaciones de gestión, actividades en las que gastaron muchas horas de sus vidas. Sin su entrega, la Ibero León no sería lo que hoy somos: una universidad de excelencia académica y humana”.