La Biblioteca Jorge Vertiz Campero S.J. fue sede de la presentación editorial del libro ‘Cómo repartir herencias sin matarse en el intento’, obra de la Mtra. Lilia Edith Martínez Padilla cuya publicación es una útil y práctica guía desde la perspectiva psicológica.
La maestra Martínez Padilla es licenciada en Derecho y en Psicología. Tiene formación en Perspectiva de género, Psicoterapia psicoanalítica y Mediación de conflictos.
Participaron con sus comentarios el Mtro. Luis Aníbal Robles Durán, coordinador de la maestría en Psicoterapia Clínica de la Ibero León; y el Mtro. Braulio Eduardo Amaro Guevara, asesor jurídico especializado en derecho civil familiar, patrimonial y mercantil. La Mtra. Margarita Ortega, responsable de Promoción y Comunicación Editorial de la Ibero León, fungió como moderadora.
La actividad inició con la opinión de cada uno de los y la especialista en torno a los mitos más comunes acerca de los testamentos. El maestro Amaro Guevara expuso que se cree erróneamente que sólo los y las cónyuges pueden heredar; también, que la existencia de un testamento evita conflictos, sin embargo, pueden surgir familiares que piden su anulación o revocación. Este proceso, también se piensa como un trámite sencillo, pero no lo es, precisó.
El maestro Robles Durán expuso que en nuestra sociedad predomina la creencia de que “papelito habla”; sin embargo, también “se plantea muchas veces que el deseo de quien fallece, al haber sido comunicado –sin un documento legal de por medio– tendría que cumplirse”.
La autora mencionó que las personas suelen olvidarse de que el heredar tiene también una connotación de pérdida que implica trámites, denuncias y sobrellevar el duelo. “Otro de los mitos es que se cree que nos toca heredar, pensando que como hijo o hija obligatoriamente nos tienen que dejar algo; tan es así, que a veces dicen ‘Herédame en vida’ (…) Realmente no, en un momento dado es un privilegio si es que nos quieren otorgar algo”, aseguró la maestra Martínez Padilla.
El maestro Robles Durán introdujo una de las partes más importantes de la publicación en la que la autora enfatiza desde la perspectiva de la psicología el significado del dinero y su relación con las personas.
Invitó a las y los asistentes a reflexionar acerca de la dicotomía que existe en el tema de los testamentos en cuanto a la vida y la muerte. “Implica moverse entre las dos, porque es poder seguir viviendo a pesar de la muerte (…)”.
La autora explicó que conductas o reacciones que personas adultas pueden tener en relación a los testamentos, por ejemplo, querer arrebatar una herencia, son dictadas incluso desde las etapas tempranas de la vida.
“No es lo mismo llegar a una familia en la que todo está en abundancia que en una que está pasando por una crisis económica. Todo eso, incluso desde antes si nos planearon o nos imaginaron, nos desearon, influye en nuestro ser”, aseguró la maestra Lilia.
“(El dinero) a nivel interno está ligado con ese momento de nuestra vida, cómo nos vinculamos desde el día uno –o antes– con este mundo, qué tan capaces somos de dar, cómo recibimos, como abrazamos lo que recibimos, o incluso si lo destruimos o lo arrebatamos. Ahí también hay otros factores que pueden incluso instaurarse de muy corta edad como una actitud envidiosa. Las rivalidades fraternas ahí siempre salen”, apuntó la maestra Martínez Padilla.
Finalmente, los especialistas y la especialista recomendaron que al heredar, sean más de una persona quienes se hagan cargo del trámite, puesto que los procesos administrativos suelen ser emocionalmente desgastantes; también, que externen sus sentimientos sobre lo que va sucediendo sobre la administración, repartición y organización de la herencia; y que busque ayuda especializada.
