Con la Lectio Brevis "Los jesuitas formadores de líderes", impartida por el Padre Ignacio Rodríguez Jiménez S.I. fue inaugurado el año académico 2017-18, en la Universidad Iberoamericana León.
En un mensaje introductorio, el rector de esta casa de estudios, Padre Felipe Espinosa Torres S.J. dio la bienvenida a este nuevo ciclo escolar a los universitarios y les invitó a dimensionar el compromiso personal, y con su comunidad, que adquieren al estar en esta universidad confiada a la Compañía de Jesús.
En la tradición universitaria jesuita la exposición magisterial o lección breve ( lectio brevis), con que se inaugura el año académico, es una oportunidad para la comunidad universitaria de reflexionar en torno a un tema de interés actual.
En esta oportunidad el Padre Ignacio Rodríguez director del Centro de Formación Humanista de la Ibero León, expuso el tema Los Jesuitas Formadores de Líderes. Inició por enlistar personajes destacados en los ámbitos político, financiero, filosófico, literario, cinematográfico, teológico y eclesial, que han sobresalido a lo largo de la historia en el mundo, con un denominador común: su formación educativa jesuita:
" Emmanuel Macron, actual presidente de Francia, Juan Carlos I, Rey de España, Raúl Castro, Presidente de Cuba, Pierre Trudeau, Primer Ministro de Canadá, René Descartes, fundador de la filosofía moderna, Voltaire, pensador francés, Miguel de Cervantes, escritor autor de Don Quijote de la Mancha, Rubén Darío, poeta nicaragüense, Gabriel García Márquez, premio nobel de literatura… en la cinematografía Alfred Hitchcock, cineasta británico, Luis Buñuel, director de cine español y Alejandro González Iñárritu, director de cine mexicano.
¿Y dónde se encuentran los principios de liderazgo aprendidos por estos líderes o personalidades, educados por jesuitas? La respuesta, comentó, está en el sistema educativo de la Compañía de Jesús: la Ratio Studiorum.
Orígenes
Se acaban de cumplir, dijo, cuatrocientos diez y ocho años de la publicación de la Ratio Studiorum ( 1599-2017) que es el modo de proceder de los jesuitas en los estudios; la ratio consiguió la organización de un sistema educativo y la implantación pedagógica única en el mundo. Lo ha hecho durante casi dos siglos y su éxito es indiscutible, puntualizó el padre jesuita Ignacio Rodríguez.
Los antecedentes de la Ratio se encuentran en lo que Ignacio de Loyola escribió en las Constituciones, documento fundante de la Compañía de Jesús; en su parte IV trata sobre la formación de los miembros de la Compañía y de los estudiantes externos, no jesuitas. Lo que se esperaba que estos alumnos llegaran a ser en su vida profesional y social, influyentes líderes al servicio de la sociedad.
Ignacio era un hombre práctico que no se queda en el terreno de lo teórico, sino que pretende llegar, a través de todos los medios educativos, al fruto real y concreto de mejorar la vida y las costumbres de los alumnos, por el cultivo de las actitudes, hábitos y virtudes.
Éste es el gran legado de Ignacio a la obra educativa de la Compañía, destacó el ponente.
Prioridades
Compartió las prioridades de la educación jesuita: poner énfasis en las humanidades, llevar un orden progresivo observando cuidadosamente el seguimiento de las distintas materias y la participación de los alumnos en su propia formación. Ignacio pretende, principalmente, estructurar la mente y el corazón del alumno con criterios profundamente fundamentados en la razón y en la fe que puedan llegar a ser una concepción de vida que influya en la conducta humana y cristiana de cada estudiante.
El Padre Ignacio Rodríguez Jiménez S.I. expuso a alumnos y maestros sucesos que formaron parte de la evolución histórica de la pedagogía jesuítica en la nueva Compañía. Documentos y líneas de acción con las que han respondido a las distintas realidades y necesidades de nuestro mundo.
En sus conclusiones, señaló que la educación actual de las universidades confiadas a la Compañía de Jesús, está orientada hacia los valores, pone a Cristo como modelo de la vida humana, pero con respeto hacia otras posturas. Es una preparación para un compromiso en la vida activa. Pretende formar hombres y mujeres para los demás, y expresa gran preocupación por los pobres.
Una auténtica excelencia académica y humana es la que, haciendo vida el ideal de la autonomía personal, promueve la justicia y va más allá de ella con compromisos de total entrega y servicio. Es la excelencia que promueve el Magis Ignaciano. Y es la excelencia que comprometemos en la Universidad Iberoamericana León, finalizó.
