Como parte del Seminario Historia del Pensamiento Ignaciano, fue presentada la ponencia " Los secretos del Archivo Secreto Vaticano, ASV".
La conferencia que contó con la presencia de nuestro Padre Rector, el Mtro. Felipe Espinosa Torres S.J., fue impartida por el Padre Rafael Ignacio Rodríguez Jiménez S.I. quien precisó es "una exposición más autobiográfica, su experiencia personal en el Archivo del Vaticano".
"El patrimonio documental cubre un lapso de tiempo de unos trece siglos, del s. viii al s. xxi. Fue creado en 1612 por el papa Pablo V y custodia más de 150 millones de documentos en sus 85 kilómetros lineales de estanterías, en más de 630 fondos de distintos archivos", expuso el Padre Rafael Ignacio, Director del Departamento de Formación Humanista de esta universidad.
El asv ha sido con justicia llamado "archivo de archivos"; en él se han depositado durante siglos los documentos referentes a la vida de la Iglesia Católica que, prácticamente, está presente en todo el mundo, añadió.
Para el caso de México este archivo ofrece un valioso aporte al conocimiento de nuestra historia, desde antes de la conquista (como el Códice Borgia), hasta nuestros días. El Códice Borgia, llamado "De la Noche y Vientos", es precortesiano, probablemente de finales del siglo xv, se cree que fue elaborado en Puebla; es un calendario con símbolos rituales y adivinatorios; en el siglo xvi fue enviado de México a España, y de ahí a Italia; se le conoce como Códice Borgia porque perteneció al cardenal Stefano Borgia, del s. xviii.
El documento más antiguo, comentó el Padre Ignacio Rodríguez, se remonta al siglo VIII; trece siglos de documentos tras los que se guardan historias y personajes, y se conserva documentación sin interrupciones ya a partir del año 1198. Entre otros archivos históricos, se encuentran obras que incluyen códices, papiros, pergaminos y cartas originales que dan testimonio de algunos de los momentos más significativos de la historia.
El Mtro. Rodríguez Jiménez citó Algunos Documentos Especiales:
· Se encuentran las actas del proceso contra Galileo Galilei (desde 1616 hasta 1633), que contienen todos los documentos de ese juicio recogidos por la Congregación del Santo Oficio; está, por ejemplo, el escrito con el cual abjuró Galileo el 22 de junio de 1663. Como la Inquisición lo iba a condenar a muerte (aunque aquí no por herejía) si no se retractaba de su afirmación de que la tierra giraba alrededor del sol, fue cuando, según la tradición y de acuerdo a un señor que estaba ahí presente, el escritor y viajero ilustrado Giuseppe Baretti, después de abjurar de la visión heliocéntrica del mundo, ante el tribunal de la Santa Inquisición, Galileo pronunció aquella polémica frase: eppur si muove (y, sin embargo, se mueve).
· Otro documento es el Pergamino de Chinon, del Papa Clemente v, que mide 60 metros de largo, y contiene el proceso contra los Templarios de Francia, por el que se disolvió la Orden del Temple, en agosto de 1308. Incluye el testimonio de 231 caballeros templarios que fueron depuestos por comisarios apostólicos del Papa.
· Se conserva la bula "Decet Romanum Pontifice", de 1521, con la que León X excomulgó a Martín Lutero, el fundador de la Reforma Protestante. Y una nota escrita por la reina María Antonieta en la cárcel, antes de ser ejecutada (1793), en la que expresa sus últimos sentimientos.
· Está la documentación del "Período Oculto", con documentos de Pío xii y la ii Guerra Mundial. Donde, por ejemplo, está una carta de sacerdotes recluidos en el campo de exterminio nazi de Dachau, así como documentos del Papa Pío xii y sus presuntos lazos con el nazismo en la Segunda Guerra Mundial.
· EL ASV guarda los primeros evangelios prohibidos, o los que hasta la fecha son considerados apócrifos y varios de los cuales no son conocidos; entre éstas la más importante es la primera carta sobre la anulación de un matrimonio, la petición de la anulación matrimonial del Rey Enrique viii de Inglaterra, cuya negación provocó el rompimiento de las relaciones entre el Vaticano y la Gran Bretaña y derivó en la aparición del anglicanismo.
El Archivo sólo puede ser visitado por investigadores e historiadores previa acreditación profesional y visto bueno de las autoridades del Vaticano; aunque, de todas formas, no se tiene acceso a cualquier documento, precisó el Padre Rafael Ignacio.
El vaticano abre sus archivos por pontificados. Y cada Papa puede abrir los pontificados que quiera. "Cuando yo estuve ahí por primera vez sólo se permitía ver hasta el pontificado de Benedicto xv, que murió en 1922; actualmente, desde el 18 de septiembre de 2006, por orden de Benedicto xvi, se puede tener acceso a los documentos del archivo hasta el pontificado de Pío xi (1939).
Al finalizar, se hizo la invitación a la Conferencia "Documentos Confidenciales y Desconocidos de los Jesuitas", el próximo 15 de marzo, en la Sala Ignacio Ellacuría.
